…de la serie “Fragmentos de un día”….
Pintar hoy en día, resulta ser un acto de resistencia.
John Berger Resulta sorprendente que historiadores y críticos de Arte de la talla de Ulrich Obrist y Robert Store subrayen una y otra vez en sus recientes artículos y conferencias que la pintura ha renacido. El pincel y el lápiz han regresado. Con más ímpetu que antes, talvez por los años en que imperaban los nuevos medios y las instalaciones, el centenario “buen oficio” se hace cada vez más presente. En algunos medios impresos es rotulada, contradictoriamente a su desarrollo histórico , como “la Nueva Pintura”.Aparece con una sensualidad deliciosa. Entra al fin a formar franca competencia en los espacios de exposición cuyas directivas, hace apenas unos años, rechazaban aun antes de hacer propuesta alguna. …y algunos resistieron…Durantes estos últimos años, artistas como Roberto Montoya insistieron en seguir adelante. Estas doce obras lo demuestran. Son segmentos del cotidiano. El individuo enfrentado a la ciudad, a la tecnología, a su trabajo y a los espacios interiores y exteriores con los que debe interactuar. Con facciones poco dicientes y miradas neutras, estos personajes se mueven en ambientes desolados creando una atmósfera inquietante a veces. Hay casi un juego entre lo real y lo surreal. En sus pinturas, la superficie es modelada por segmentos de minuciosa elaboración que alternan con espacios trabajados más libremente. Sus dibujos en cambio, son muchos más rigurosos. Hay una intención bien precisa al utilizar ambas técnicas. Las tres obras de mediano formato sobre papel, permiten un acercamiento de este personaje que en las pinturas aparece apenas esbozado .Pareciera casi una invitación para conocer más aspectos de este anónimo ciudadano. Así desglosa al paseante y el medio cotidiano , talvez para hacernos evidenciar lo que pasamos por alto ,no oímos ni vemos, en nuestra frenética actividad cotidiana. No se que va a prevalecer .Si las expresiones pictóricas de milenaria tradición o las múltiples manifestaciones artísticas que llevan pautando la escena en las últimas décadas.Lo que si puedo afirmar con tranquilidad es que las obras de Roberto Montoya aquí expuestas son una propuesta realmente válida. |